La primera división masculina se consagró nuevamente
campeona en el mayor certamen de clubes a nivel nacional. El NAC de este año iniciaba
de una manera totalmente inusual: era el primero desde que comenzaran en el año
2000, en que no habría clásico entre los dos clubes con mayores títulos
argentinos, partido que año a año le brinda un sabor especial a este torneo,
que en esta oportunidad encontraba a Patronato disputando la zona ascenso. Ya
sin ese candidato, eran tres las novenas paranaenses que arrancaban como
favoritas, por sus desempeños a lo largo de la historia de este torneo: Don
Bosco, CPEF y el CAE.
A lo largo del round robin, el elenco de la avenida se
sembraría en la final directamente, venciendo a los albinegros y a los azules,
cediendo un juego ante Morón.
Cepef, también con una sola derrota, quedaría en la
semifinal, y Estudiantes clasificaría al primer partido de play off tras un
récord de 4 ganados (CATSA, Sarmiento, Mayú y Morón) y 3 perdidos.
La fase decisiva del torneo comenzó el domingo por la
mañana, en el diamante Ing. Ricardo Cargnel, del Plumazo. Indios (que ya había
vencido a los del parque) se adelantaba en la parte baja del 3er episodio,
pisando tres veces el Home Plate. En el ataque inmediato, Estudiantes se
repondría tras hits de Petric y Gamarci, y un Home-Run remolcador de Nicolás
Bittor.
El partido se mantendría sin variaciones hasta el 7mo
episodio, en el que el CAE demostró un gran poder ofensivo, anotando 5 más,
para un score definitivo de 8-3.
Estudiantes llegaba así a la semifinal, dónde aguardaba
CPEF, comandado defensivamente por un gran trabajo de Maximiliano Montero desde
el círculo central.
Tras 7 episodios de un verdadero duelo de lanzadores, el
partido llegaba al primer extra inning, con el tablero empatado en 2. El CAE se
adelanta, con 2 carreras, pero en el cierre del período CPEF vuelve a empatar
el marcador.
En el 9º, un bateo de Luciano Giardinella produce una
jugada confusa, en el que la defensa intenta ponerlo out no-forzado retornando
a primera, situación que es aprovechada por el corredor emergente albinegro
Alan Peker, para anotar la carrera del triunfo, y dejando la 2da victoria del
día en manos de Juan Potolicchio, que hasta entonces había lanzado 16 entradas
en la jornada.
Así, con mucho esfuerzo, el CAE llegaba otro año más a la
final, en la que se encontraría nuevamente con Don Bosco, a quien había
derrotado en la edición anterior, por un ajustado 2-1 en la parte baja del 7mo.
En el primer inning, el marcador se mantendría en 0, tras
ponchar tres bateadores Francisco Sabaté, y no poder anotar luego Don Bosco,
con corredores en las esquinas.
Ya en el 2do período comenzaría un partido diferente, en el
que Estudiantes, episodio tras episodio, desarrollaría un terrible asedio sobre
las defensas azules, conectando un total 13 imparables y anotando 6 carreras
para culminar el encuentro tras 6 entradas, por la regla de la piedad.
Así, el CAE regalaría a su público la que sería la mejor de
todas las jornadas disputadas en esta edición del torneo, anotando 18 carreras
y recibiendo 7, para conseguir el tricampeonato nacional consecutivo, y su 9º
título de 14 disputados, desde que comenzara este formato.
En la ceremonia de premiación, Estudiantes recibió una nueva
copa challenger, ya que la anterior la había ganado tras otro tricampeonato, en
las ediciones 2002,2003 y 2004.
Además fue distinguido como mejor lanzador del torneo Juan
Potolicchio, de gigante desempeño, lanzando los 22 períodos del domingo, y con
un ERA durante el round robin de 0.00.